La falta de recursos económicos para comprar útiles escolares, pago de pasajes y de inscripciones fue el factor principal para que 49.7% de estudiantes dejaran inconclusa su vida académica, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Deserción Escolar en la Educación Media Superior a febrero de 2018.

El cómo solventar la educación de los hijos, es una de las principales preocupaciones de los padres de familia y uno de los mayores retos financieros a los que tendrán que enfrentarse; en especial si optan para una universidad privada o estudios en el extranjero. Sin embargo, más que preocuparte, lo ideal es ocuparte con anticipación sobre el futuro educativo de tus hijos y evalúes las opciones disponibles para lograrlo.

Existen varios vehículos financieros para planear la educación de los hijos de manera anticipada, y aunque su objetivo es el mismo, tienen cualidades que los hacen diferenciarse entre sí. En esta ocasión, te ayudaremos a distinguir las diferencias entre un fideicomiso educativo y un seguro educativo, para que veas cuál se adapta mejor a tus necesidades:

Seguro educativo

Es un vehículo de previsión anticipada (técnicamente no es un vehículo de inversión) que además de ser parecido a un plan de ahorro, garantiza que el beneficiario, es decir tu hija o hijo, reciba el dinero acordado para continuar sus estudios en nivel superior aun cuando faltes.

Los pagos son conocidos como primas y se refiere a los montos a pagar por concepto del seguro, mismos que pueden ser de manera mensual, trimestral, semestral o anual, según tu elección, en todos los casos te cobran un porcentaje de interés. El inconveniente con los seguros educativos es que el periodo de pago de las primas es muy largo, ya que pueden llegar a tener una duración de 18, 20 o hasta 22 años dependiendo de la edad que tengan tus hijos al momento de contratarlo.

Un seguro educativo desempeña las mismas funciones de un seguro de vida, por lo que es primordial que tengas en cuenta que las compañías aseguradoras toman mucho en cuenta es tu salud, qué tipo de persona eres y cómo llevas tu vida, para de esta forma establecer el valor de una prima. Es decir, si eres una persona fumadora o tienes alguna enfermedad, el monto de tus pagos tiende a aumentar considerablemente; lo mismo con la edad que tengas al momento de contratar.

De igual manera debes considerar que, si por alguna razón se te dificulta seguir cubriendo el pago de las primas y cancelas la póliza, no recibirás el total de la suma asegurada, sino únicamente lo que lleves ahorrado hasta el momento. Ten mucha precaución, ya que en dado caso de que decidas interrumpir la inversión y retirar el dinero, los seguros incluyen penalizaciones y éstas suelen ser muy altas.

Fideicomiso educativo

Un fideicomiso educativo es un instrumento jurídico y financiero que da la flexibilidad de realizar operaciones para beneficio del contratante, en este caso, la educación de tu hijo. Este fideicomiso educativo debe estar operado por un banco, quien funciona como el fiduciario y es el encargado de captar, custodiar, administrar y reinvertir las aportaciones para generar rendimientos del dinero del contratante, el cual está destinado exclusivamente para la educación. 

Una de las características principales de un fideicomiso educativo es el periodo de aportación, el cual llega a ser menor que el del seguro educativo, esto hace que quien lo contrata tenga mayor facilidad para llevar un ahorro a largo plazo, conociendo la cantidad y los periodos de aportación.

Los planes de ahorro del fideicomiso educativo que promueve Mexicana de Becas están contemplados en bloques de 4 o 5 años. Sabemos que todas las familias presentamos ciclos económicos favorables y desfavorables; y entendemos que cuando una familia tiene una obligación financiera de un periodo muy largo, es muy probable que entre en algún bache económico que haga que pierda la capacidad de seguir manteniendo esa obligación financiera.

A diferencia del seguro educativo en donde el valor de la prima depende de factores de riesgo como la edad y salud, con un fideicomiso educativo tienes mayor libertad al momento de ahorrar, toda vez que puedes calcular el precio de la universidad de tu elección y con esa proyección se calcularán las aportaciones de tu plan de ahorro.

Por otro lado, por tratarse de un ahorro exclusivo para la educación, los rendimientos obtenidos por medio de un fideicomiso educativo están exentos del Impuesto Sobre la Renta (ISR) de acuerdo con el Artículo 90 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta; con el seguro educativo sí tendrás que pagar dicho impuesto sobre la suma de tu inversión.

Además, durante el periodo de aportaciones, cuentas con una protección en caso de fallecimiento o invalidez total o permanente de cualquiera de los dos suscriptores. En dado caso que alguno de los padres llegue a faltar, el beneficiario recibirá el total pactado en el momento en que se cumpla el plazo para que continúe con sus estudios.

Con el fideicomiso educativo se generan rendimientos hasta que se entregue el total del ahorro, es decir, hasta que tu hijo esté estudiando la universidad y reciba el último peso generado en el ahorro. Con el seguro educativo, el riesgo de inversión es diferente y los rendimientos al no ser libres de impuestos, pueden brindar una menor cantidad para pagar los estudios a pesar de haber ahorrado de manera activa durante más tiempo.

Adicional, con los planes de ahorro del fideicomiso educativo que promueve Mexicana de Becas, tus hijos podrán acceder a descuentos en inscripciones y colegiaturas con las mejores universidades gracias a los convenios que tiene con instituciones educativas nacionales y extranjeras. Estos beneficios, son extensivos para los padres y familiares directos del beneficiario.

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En Mexicana de Becas al igual que a ti, nos importa enormemente el futuro educativo de tus hijos. Por más de 28 años hemos sido el único fideicomiso educativo abierto en México con ventajas que otros instrumentos de ahorro no tienen. Nuestros planes de ahorro educativo te permitirán brindarle la mejor educación, sin tener que perjudicar tus finanzas familiares.

Si quieres resolver dudas específicas o ampliar información comunícate con alguno de nuestros promotores de ahorro educativo para que te ayuden a generar una proyección de acuerdo a tus necesidades y a tu capacidad de inversión, ¡contáctanos!