Existen varios vehículos financieros para planear cómo costear la educación de los hijos de manera anticipada, y aunque su objetivo es el mismo, el seguro educativo y el fideicomiso educativo tienen cualidades que los hacen diferenciarse entre sí.
A continuación, te exponemos las principales diferencias:
Hablar de rendimientos (también conocidos como ganancias), puede parecer complicado de comprender puesto que en muchos casos se utilizan términos con los que no todos se sienten familiarizados, pero son más sencillos de lo que parecen.
Una vez entendido que un Fideicomiso Educativo es una inversión basada en una proyección de ahorro a mediano plazo, hay que tener presente cómo se calcula esta proyección y cómo podemos calcular los rendimientos esperados.
Como se menciona en el punto anterior, para tener claridad o un estimado del dinero que recibirás con lo que inviertas hay que conocer algunos puntos.
Partiendo de en qué Universidad o institución tienes en mente o te gustaría eligiera tu hij@, se toma el costo actual de alguna de sus carreras, se sugiere sea la carrera más costosa para estar holgados en el monto. Con este monto se proyecta con un porcentaje del 4% (porcentaje promedio de la Inflación anual) cuánto costará llegado el momento en el que ingrese a la Universidad tu hij@, por ejemplo, si hoy tu hij@ tiene 2 años, esta proyección se realizaría a 16 años, pensando que ingrese cuando cumpla 18.
En esta proyección se muestra el porcentaje de rendimientos que obtendrás, para el caso del único Fideicomiso Educativo que existe en Méxicontaje de (del cual hablaremos más adelante) el porcentaje promedio en los últimos 15 años ha estado por arriba de la inflación, Cetes e instrumentos bancarios. Esto es resultado de la administración cautelosa que tiene el Fideicomiso evitando poner en riesgo el patrimonio de las familias ahorradoras sin perder el foco de obtener ganancias en la inversión.
Como en todas las inversiones, el tiempo siempre será tu mejor aliado. Por ello, entre más pronto comiences a ahorrar e invertir para la educación de tus hijos es mejor, pues mientras más tiempo dejes crecer tu dinero, más frutos te dará.
En México, una de las principales causas de deserción escolar, es la falta de recursos económicos. De acuerdo con el estudio El valor de la educación realizado por HSBC, cuatro de cada cinco padres (85%) financia la educación de sus hijos utilizando sus ingresos diarios. Por otro lado, solo 8% de todos los encuestados está financiando la educación de su hijo a través de ahorros o planes de inversión específicos para la educación.
Debes tomar en cuenta que, debido a la inflación educativa, los costos de las universidades incrementan año con año. Mediante un comparativo desde enero de 2002 a diciembre de 2020, se puede observar que la inflación educativa (el costo promedio de las colegiaturas) ha crecido más rápido que la inflación general. Por ello, es importante considerar dentro del presupuesto familiar un Fideicomiso Educativo.
Para que sea más claro este dato, te damos un ejemplo, si tu hijo hubiera tenido 1 año en el año 2002, estaría por entrar a la Universidad en este año. Por cada $1,000 que hubieras pagado en el 2002 de colegiatura universitaria, hoy en promedio pagarías $2,653.00.
En nuestro ebook “Costos de la educación en México” te damos algunos datos interesantes sobre el costo de la educación en México que te servirán para tener en cuenta el panorama al cual te enfrentarás en unos años que tus hijos estén por comenzar sus estudios y tomarlo en cuenta en tu presupuesto familiar.
Lamentablemente en nuestro país, las universidades públicas no tienen la capacidad para aceptar la cantidad de aspirantes que desean inscribirse, es decir, la demanda de vacantes es tan alta que las instituciones públicas se ven obligadas a rechazar a un gran número de alumnos. De acuerdo con datos proporcionados por la UNAM, para el periodo 2020-2021, de los 266,383 aspirantes a nivel licenciatura a la UNAM, solo 24,635 fueron aceptados, lo que representa solo el 9%; si desglosamos por carrera hay algunas como arquitectura que apenas llega al 3% de aceptados.
Es cierto que mientras tus hijos están recién nacidos o son pequeños, los gastos que implican no son tan grandes como los que se van a presentar conforme vayan creciendo. Nunca es demasiado pronto para comenzar, a lo mejor puedes pensar que tu hijo aún es muy pequeño; sin embargo, el tiempo se pasa volando y es mejor estar preparados financieramente para el momento en que tu hijo ingrese a la universidad.
Antes de otra cosa, debes saber que en México, el único fideicomiso educativo abierto lo encuentras en Mexicana de Becas; el cual es operado por Grupo Financiero Santander México.
Aquí te dejamos una serie de sencillos pasos para contratar un Fideicomiso Educativo:
Define qué universidades te interesan para tu pequeño, investiga qué costos pueden tener las escuelas de tu elección y si es posible realiza una proyección de los costos que tendrán cuando llegue el momento de que tu pequeño ingrese. Realizar este análisis te ayudará a tener una idea de cuánto es lo que debes ahorrar para cumplir este objetivo.
En Mexicana de Becas podemos orientarte a definir una meta de ahorro y ayudarte a diseñar el plan de aportación de acuerdo con la economía de tu hogar, respondiendo estas preguntas clave:
Con estos datos, podemos hacer una proyección de ahorro que toma en cuenta el costo de las universidades actualmente, inflación educativa y rendimiento promedio de Mexicana de Becas.
Un detalle muy importante es la edad de tus hijos, esto será un tema de gran relevancia dado que, con base en esta información, se podrá hacer una proyección de los rendimientos que podrías lograr con tu inversión inicial.
Ten en cuenta que en Mexicana de Becas no vendemos universidades; es importante aclarar que, el pensar o mencionar una universidad en este caso, es solo para efectos de proyectar el ahorro que harás, no significa que estés contratando un ahorro para esa universidad en específico. La universidad la elegirá tu hijo y puede ser pública, privada, nacional o extranjera, siempre y cuando esta tenga validez y reconocimiento oficial. ¡Tu inversión no está condicionada a ninguna universidad!
¿Cuánto cuesta un fideicomiso educativo?
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Un promotor de ahorro educativo de Mexicana de Becas puede orientarte en definir una meta de ahorro y te ayudará a diseñar el plan de aportación de acuerdo con la economía de tu hogar, respondiendo estas preguntas clave:
Con estos datos, podemos hacer una proyección de ahorro que toma en cuenta el costo de las universidades actualmente, inflación educativa y rendimiento promedio de Mexicana de Becas.
Un detalle muy importante es la edad de tus hijos, esto será un tema de gran relevancia dado que, con base en esta información, se podrá hacer una proyección de los rendimientos que podrías lograr con tu inversión inicial.
Es importante reiterar que tú decides el monto y la periodicidad de tu ahorro objetivo, en función de tus posibilidades económicas actuales: pago único, mensual, trimestral, semestral y anual.
¿Quién puede contratar un fideicomiso educativo?
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Padres de familia con hijos menores de 10 años que busquen construir a través de una inversión programada, segura y de mediano plazo, un patrimonio con el que podrán solventar los costos totales o parciales de la educación superior o media superior de sus hijos.
¿Qué pasa si muero o mi hijo fallece?
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Durante el periodo en que realizas tus aportaciones, cuentas con una protección en caso de fallecimiento o invalidez total o permanente de cualquier de los dos suscriptores, que cubre las aportaciones remanentes planeadas y permite concluir la inversión objetivo*. En este caso, llegado el momento en que su hijo(a) ingrese a la universidad o preparatoria (dependiendo del plan contratado); se le entregarán a este el capital y rendimientos generados.
Por otro lado, si el beneficiario desafortunadamente llegara a fallecer o sufriera un accidente o enfermedad que de manera permanente le impida disfrutar de su plan de ahorro educativo contratado, entonces el contratante tiene la opción de nombrar a otro beneficiario; siempre y cuando, este nuevo beneficiario sea menor que el beneficiario original.
Si el suscriptor decidiera no nombrar a un beneficiario sustituto, se le regresará (previa deducción de las cantidades convenidas en el contrato del plan de becas en las Cláusulas Cuarta y Sexta) el capital acumulado más el 70% de los rendimientos generados hasta esa fecha debido a que el objetivo del plan no se cumplió. El monto restante de los rendimientos generados pasará a formar parte del fondo generacional correspondiente a los beneficiarios considerados dentro de la misma generación.
¿Qué pasa si mi hijo decide no estudiar?
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En los 28 años de experiencia que tiene Mexicana de Becas, el porcentaje de jóvenes que llegado el momento de ingresar a la educación superior dicen que no quieren estudiar es extremadamente bajo.
Por otro lado, como madres y padres de familia interesados en el bienestar de los hijos debemos fomentar en ellos el hábito del estudio y concientizarlos en la medida de lo posible que una persona con estudios profesionales generalmente percibe un mejor sueldo que alguien que solo tiene la preparatoria.
En todo caso, si llegado el momento de elegir carrera, el beneficiario se encuentra dudoso sobre qué estudiar, pueden posponer su ingreso a la universidad un año; y mientras tanto, su dinero invertido sigue generando rendimientos durante ese periodo de gracia.
Si a pesar de esto, tu hijo(a) decide no estudiar, se puede optar por la opción de nombrar a otro beneficiario; siempre y cuando, este nuevo beneficiario sea menor que el beneficiario original.
El peor escenario es cancelar el plan, ya que como tiene el beneficio fiscal, si no se ocupa finalmente para educación, existe una penalización sobre el rendimiento.
Sin embargo, en Mexicana de Becas contamos con una prueba de Orientación Vocacional sin costo para nuestros clientes además de una red de convenios con universidades que otorgan mecanismos que orientan a los jóvenes en la elección de carrera.
¿Qué pasa si cancelo?
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De manera general, las penalizaciones van a depender del momento en el que se hace la cancelación, y estas serán sobre los rendimientos generados. Al existir el beneficio fiscal y no cumplirse el objetivo final que es la educación del beneficiario, existirá una penalización sobre el rendimiento, la cual se expresa en el contrato.
De manera general, las penalizaciones van a depender del momento en el que se hace la cancelación, y estas serán sobre los rendimientos generados. Al existir el beneficio fiscal y no cumplirse el objetivo final que es la educación del beneficiario, existirá una penalización sobre el rendimiento, la cual se expresa en el contrato.
¿Qué pasa si mi hijo estudia en una universidad pública o en alguna universidad que no esté dentro de la red de convenios de Mexicana de Becas?
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El beneficiario puede estudiar en la universidad que desee, pública o privada, siempre y cuando tenga validez oficial. Hay muchas familias que ahorraron con nosotros pensando en que probablemente tendrían que cubrir colegiaturas costosas y que él o la joven se encuentran estudiando en la UNAM, IPN, UAM u otra institución pública.
Todas las familias recibirán sus recursos íntegros, porque se está cumpliendo la condición de que ahorre para la preparatoria o universidad. La red de convenios con instituciones privadas de prestigio tiene el objetivo de acercar descuentos con los cuales se pueden ahorrar hasta un año de colegiatura, pero hay absoluta libertad de estudiar en la universidad y carrera que desee; siempre y cuando estos cuenten con reconocimiento de validez oficial en México o incluso en el extranjero, y sean legalmente reconocidas.
¿Qué pasa si estoy atravesando por un momento económico difícil y no puedo continuar aportando a mi plan de ahorro contratado?
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En este caso, el suscriptor titular puede comunicarse con Mexicana de Becas para indicarnos que está atravesando un momento económico difícil y buscar alternativas para sobrellevar esta situación que le permitan continuar con el plan de ahorro y evitar llegar a la cancelación, que es lo menos recomendable.
Es importante señalar que dichas alternativas tienen que ver con la postergación de las aportaciones planeadas, por lo cual la estimación que se tenía en un inicio de cuánto monto iba a generar en el futuro, definitivamente va a variar, ya que durante un periodo se estaría interrumpiendo el ahorro.
Mexicana de Becas es una organización que promueve un Fondo de Ahorro Educativo desde hace más de 28 años; permitiendo a los padres de familia con hijos menores de 10 años construir a través de una inversión programada y de mediano plazo, un patrimonio con el que podrán solventar los costos totales o parciales de la educación superior o media superior de sus hijos.
Entre sus principales ventajas y beneficios se encuentran:
[1] Suscriptores son aquellas personas que contratan el plan de ahorro. Ej.: Mamá, papá, abuelo(s), tío(s).
[2] Beneficiario es el niño o niña objeto del plan de ahorro.
[3] Cláusulas referentes al gasto de administración y patrimonio del fideicomiso.