Es común que las decisiones financieras diarias de las familias incluyan pequeños placeres, o “gustitos”, que parecen insignificantes en el momento, pero que sumados pueden representar una cantidad considerable al final del mes.

Estos gastos hormiga como el café diario de Starbucks, las suscripciones a plataformas de streaming, las salidas a conciertos, el uso frecuente de Uber y las compras en plataformas en línea como Amazon son pequeños “caprichos” que, si bien nos brindan satisfacción inmediata, no necesariamente aportan a un objetivo a largo plazo.

¿Y si destináramos parte de estos gastos al futuro educativo de nuestros hijos? A continuación, analizaremos cómo estos gastos hormiga podrían convertirse en una inversión significativa para la educación universitaria de los más pequeños de la casa.

Ejemplos de gastos hormiga comunes y cuánto cuestan al mes

Para visualizar el impacto de estos “gustitos”, imaginemos los siguientes gastos promedio que muchas familias suelen hacer cada mes:

• Café de marca diaria: Si se compra un café por $50 pesos cada día laboral, al mes representa un gasto de $1,000 pesos.
• Suscripción a streaming (Netflix, Disney+, etc.): Entre dos plataformas de streaming, el costo mensual puede ser de $371 pesos.
• Uso de Uber: Si se utiliza Uber dos veces por semana con un gasto de $100 pesos por viaje, el total mensual es de $800 pesos.
• Compras en Amazon y otras apps: Un presupuesto moderado de $1,000 pesos mensuales para compras en línea.
• Salidas a conciertos o entretenimiento: Suponiendo una salida mensual con un costo promedio de $1,200 pesos.

Estos gastos hormiga suman alrededor de $4,371 pesos al mes. Este monto, que se gasta en satisfacciones inmediatas, podría redirigirse en gran parte hacia plan de ahorro educativo para la Preparatoria o Universidad de nuestros hijos.

Comparación de gastos hormiga vs. ahorro educativo de Mexicana de Becas

Para tener una idea clara de cómo un plan de ahorro educativo de Mexicana de Becas podría beneficiar a nuestros hijos, comparemos los $4,371 pesos de gastos hormiga con un posible plan de ahorro mensual para Universidad.

Gasto hormiga en 5 años = $4,371 mensuales * 12 meses = $52,452 anuales x 5 años = $262,260 pesos.

Por otro lado, supongamos tienes un hijo de 3 años y que decides destinar $4,371 pesos al mes para un plan de ahorro educativo durante 5 años. Esta cantidad podría crecer de forma considerable en el tiempo, y al final, este ahorro mensual podría sumar un fondo significativo para cubrir gran parte de los estudios universitarios de tu hijo.

En el siguiente ejemplo de proyección puedes ver que al destinar e invertir $4,371 pesos al mes durante 5 años, tu inversión total es de $262,260 pero el reembolso total que obtendrías podría ser de $405,635.61.

En Mexicana de Becas, invertimos tu ahorro a través de un fideicomiso educativo para hacerlo crecer, y posterior al primer año de tus aportaciones, ese ahorro comienza a generar rendimientos hasta que tu hijo concluya sus estudios. ¡Recuerda que el periodo de ahorro es de solo 5 años!

El valor de invertir en el futuro educativo de tus hijos

Ahorrar para la educación universitaria de los hijos puede parecer una meta distante, pero cuanto antes comencemos, menor será el esfuerzo mensual requerido. Planificar desde una edad temprana no solo aligera la carga financiera a largo plazo, sino que también abre la puerta a oportunidades académicas de calidad.

Un plan de ahorro educativo es una herramienta poderosa para asegurar que, llegado el momento, tu hijo pueda asistir a la universidad sin limitaciones financieras. Cada mes, en lugar de destinar la totalidad de tu presupuesto a “gustitos”, puedes invertir en su formación, asegurándole un futuro lleno de posibilidades.

Convertir “gustitos” en educación

Tomar el control de nuestros gastos hormiga y destinar parte de ellos a un fondo educativo es un acto de amor y visión hacia el futuro de nuestros hijos. En lugar de darnos una satisfacción pasajera, estás invirtiendo en algo duradero y significativo.

Piensa que cada café, cada pedido de Uber o cada suscripción de streaming puede transformarse en una oportunidad educativa. Además, establecer un plan de ahorro educativo no significa eliminar todos los pequeños placeres; significa equilibrarlos para que también formen parte de un proyecto a largo plazo. Al final, la satisfacción de ver a tus hijos alcanzar sus metas académicas y profesionales es el mayor “gustito” que te puedes dar.

Si tienes hijos pequeños el momento de actuar es ahora. A medida que se acerquen a la edad universitaria, verás cómo el esfuerzo de cada mes sumado al paso de los años les abrirá la puerta a un futuro brillante. Con un plan de ahorro educativo, puedes asegurarte de que el camino a sus sueños esté financiado y lleno de posibilidades.

Redirigir una parte de nuestros gastos hormiga a la educación de nuestros hijos es una decisión que generará un impacto significativo en su vida. Aunque duele a veces pensar en invertir en el futuro en lugar de darnos un capricho inmediato, recuerda que la educación es un regalo que se apreciará para siempre. ¡Haz del ahorro educativo una prioridad y siembra hoy las semillas de un futuro exitoso para ellos

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